India alimentará a 800 millones de perjudicados por COVID-19 hasta noviembre

El Gobierno de la India anunció hoy la extensión hasta noviembre de su programa de alimentación gratuita para los pobres que han perdido su sustento por la crisis del coronavirus, y espera con ello alimentar a 800 millones de personas, mientras el país entra en la segunda fase de desescalada con pocos cambios y las infecciones por COVID-19 al alza.

«El Gobierno va a distribuir sin costo 5 kilos de arroz o trigo y un kilo de garbanzos por cada miembro de la familia al mes», anunció el primer ministro indio, Narendra Modi, en un mensaje televisado a la nación con motivo de la entrada en la fase 2, a partir de mañana, miércoles.

Modi explicó que «durante y después del monzón -época de lluvias que suele durar de junio a septiembre- sólo hay trabajo en el sector agrícola, mientras otros sectores se ralentizan», lo que unido a la paralización económica derivada del confinamiento para frenar el coronavirus, ha puesto en una grave situación a gran parte de la población.

Además, indicó, «desde julio comienza la temporada de festivales» religiosos que «incrementa las necesidades y los gastos» de las familias y, por ello, ve necesario extender el programa de alimentos gratuitos que comenzó en abril hasta «cubrir los festivales de Diwali y Chath Puja», los últimos importantes del año, a finales de noviembre.

Descuidos en la desescalada

En su discurso, Modi señaló que «desde que se anunció la fase 1, ha aumentado el descuido en los comportamientos personales y sociales», respecto a las normas de seguridad frente al coronavirus.

«Antes éramos más cuidadosos a la hora de llevar mascarilla y mantener la distancia social, lavarse las manos (…) Hoy debemos estar más alerta, el descuido es una causa de preocupación», aseveró.

A pesar del desconfinamiento, la curva de infecciones continúa al alza en la India que, con 566.839 casos positivos de la COVID-19, es el cuarto país más afectado por la pandemia, tras Rusia, Brasil y Estados Unidos, según los datos de la universidad estadounidense Johns Hopkins.

De ellos, hasta hoy 334,821 se han recuperado de la enfermedad y 16,893 han muerto.

Al respecto, Modi celebró que la baja tasa de mortalidad del país que lo coloca, según él en una «posición relativamente buena» y que explica en la temprana aplicación del confinamiento a finales de marzo cuando apenas había unos 500 casos en todo el país.

Segunda fase de desescalada con pocos cambios

La segunda fase del desconfinamiento que mañana, miércoles, empieza la India y que, de momento estará vigente hasta el 31 de julio, implica pocos cambios respecto a la situación de la primera fase.

Una orden del Ministerio del Interior publicada anoche especificaba que durante la nueva etapa «todas las actividades fuera de las zonas de contención (del virus) estarán permitidas», salvo el metro, los vuelos internacionales de pasajeros, los eventos masivos y lugares de reunión como teatros, cines, bares, gimnasios o piscinas públicas.

En la práctica no implica una gran modificación, ya que en la primera fase ya pudieron abrir los templos, hoteles y restaurantes y centros comerciales y, la mayoría de las tiendas pudieron hacerlo con anterioridad.

Aunque en un primer momento el Gobierno preveía abrir los centros educativos en la segunda fase, finalmente ha optado por mantenerlos clausurados al menos hasta el 31 de julio, con excepción de los centros de formación profesional, que podrán abrir a partir del 15 de julio.

Además, relaja en una hora el toque de queda nocturno vigente en todo el país, que pasa a regir desde las 22,00 hasta las 5 de la madrugada.