La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, dio a conocer que Estados Unidos decidió no cobrar aranceles a las autopartes hechas en México. Esta decisión respeta lo que dice el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y es una buena noticia para el país, especialmente para la industria automotriz.
“La industria de autopartes es muy importante para México, y que podamos seguir exportando sin pagar aranceles es una gran ventaja”, dijo Sheinbaum.
El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, explicó que esto se logró porque México cumple con las reglas del tratado, que dicen que si las piezas se hacen en alguno de los tres países, se les debe dar un trato preferencial. Es decir, las autopartes mexicanas serán tratadas como si fueran hechas en Estados Unidos.
Ebrard también comentó que México y Estados Unidos han trabajado juntos durante muchos años en la industria automotriz, y que poco a poco México ha aumentado su participación en la fabricación de vehículos.
A pesar de esta buena noticia, las autoridades mexicanas recordaron que todavía hay productos como el acero y el aluminio que siguen pagando aranceles en Estados Unidos. También advirtieron que poner nuevos impuestos a la industria automotriz podría poner en riesgo muchos empleos y exportaciones importantes para el país.