¡Las plazas comerciales han dejado de oler a palomitas y nachos!
Al día de hoy, más del 50% de los cines en México permanecen cerrados sin ninguna instrucción de cuándo van a volver a estar abiertos. Miles de personas han perdido sus empleos en negocios relacionados con la industria cinematográfica. Todo esto han sido estragos de la COVID-19 para distintas cadenas nacionales e internacionales.
Por otro lado, la plataforma de Disney+ superó el mes pasado pasada los 90 millones de suscriptores en tres años antes de lo previsto; así como NETFLIX tiene ahora más del 30% de usuarios que en el 2019. Sin duda, el servicio de streaming está llevándose el mercado hacía un lugar que no se imaginaba hace algunos años.
Estudios como MGM y Sony han sufrido de una manera similar, pues el 2020 cerró para estas dos grandes marcas con una búsqueda de plataforma a las cual unirse. Y en una realidad opuesta, Disney puede darse el lujo de decidir que cada título de forma independiente será puesto en análisis para saber si conviene más ponerlo en cines o en su plataforma. ¡Ouch!
No obstante, me gustaría puntualizar que es casi improbable que una película que supere los 300 millones de presupuesto pueda llegar a ser igual de rentables en estas plataformas sin pasar por un cine, pero el servicio de streaming si genera menos costos de distribución lo cuál les ahorra una gran parte de la ganancia.
Te invito a leer las estadísticas y los números que han alcanzado películas como Múlan, Enola Holmes, Greyhound, y Trolls World Tour para conocer cuáles de ellas han sido un éxito “taquillero” y cuáles sufrieron la pandemia.
