En una grave acusación que se suma al agitado entorno del Partido Revolucionario Institucional en San Luis Potosí, la madrugada de este domingo se presentó una denuncia contra Alberto Rojo Zavaleta, secretario técnico del Consejo Político Estatal del PRI, por un presunto intento de homicidio. Los hechos ocurrieron cuando la regidora capitalina Margarita Hernández Fiscal intentaba entregar un oficio relacionado con asuntos internos del partido.
En un video difundido en redes sociales, los afectados Margarita Hernández Fiscal y José Manuel Jonguitud Flores relataron que Rojo Zavaleta, desde su vehículo, habría arremetido contra ellos con la aparente intención de lesionarlos o incluso atentar contra su vida. Según la denuncia, el ataque se dio en un contexto de tensión política, luego de que intentara hacer llegar un escrito en nombre de Hernández Fiscal, quien ha sido crítica de la dirigencia actual del PRI.
Jonguitud Flores señaló en el video: «Sufrí propiamente un intento de homicidio por parte de Alberto N. Aventó su vehículo sobre mí con toda la intención de lesionarme o, en su mentalidad, quizá de asesinarme. No sé qué temor tengan en este momento.»
Por su parte Hernández Fiscal informó que, tras el incidente, recibió mensajes intimidatorios donde se le acusaba de allanamiento, destrucción de propiedad y robo, hechos que niega rotundamente. En su declaración, denunció que estos señalamientos forman parte de una estrategia para desacreditarla y generar miedo entre quienes buscan democratizar el partido.
Los denunciantes responsabilizaron directamente a Rojo Zavaleta por cualquier daño que pudieran sufrir y calificó al secretario técnico como una persona violenta y peligrosa. Aseguró también que el funcionario se encontraba en estado inconveniente durante los hechos.
“He levantado una denuncia ante la Fiscalía General del Estado para que se investiguen los hechos. Esto no nos va a detener; seguimos buscando un partido democrático donde todos podamos participar”, afirmó.
Por último, la denunciante hizo un llamado a la dirigencia estatal del PRI y, en particular, a la presidenta del partido Sara Rocha Medina, para que actúe en defensa de los derechos de las militantes, especialmente en situaciones que ponen en riesgo su integridad física. También agradeció al personal de la Fiscalía por atender su denuncia e iniciar las investigaciones correspondientes.