Cada tres años se dice que la siguiente Legislatura local será peor que la anterior, ¿qué es mejor, ser gris o tener escándalos?, en este sentido, digo por la vergüenza nacional que fue San Luis Potosí hace unos años con “La ecuación corrupta” y, cuando supimos que la coalición “Juntos Haremos Historia“ sería mayoría en el Congreso del Estado, muchos pensaron que tal vez podrían mejorar algunas cosas, ya que el líder de dicha alianza pregonó cambios positivos.
Una de las promesas que hacían los aspirantes de Morena, Partido del Trabajo y del Partido Encuentro Social al Congreso local, era la reducción de salario y la desaparición del seguro médico, que se afiliarían al Seguro Social o al ISSSTE… sí cómo no.
Al inicio de la Legislatura actual Morena peleó el primer año la presidencia de la Junta de Coordinación Política, se creía que precisamente harían los cambios tan esperados en materia económica al interior del Congreso, sin embargo los pretextos por parte de Edson Quintanar Sánchez, entonces presidente de la Jucopo, no se hicieron esperar, decía que la fuerza “prianista“ era muy fuerte y no les dejaban accionar.
Al final la reducción fue de apenas el 10% y uno de los integrantes de la coalición, Mario Lárraga no definió su voto al abstenerse de disminuir tan apetecible sueldo, que finalmente quedó en los $104 mil pesos mensuales y, el priista Mauricio Ramírez Konishi fue quien se adjudicó ante medios de comunicación, la propuesta que votó la Jucopo.
En el caso del seguro de gastos médicos, a inicio de este 2020, solo tres diputados renunciaron al mismo, dos morenistas (Marite Hernández Correa y Quintanar Sánchez), así como la perredista María Isabel González Tovar… ¿y el resto de los siete de Juntos haremos historia? ¡Ah no!, como dijo la coordinadora actual de Morena en el Congreso Angélica Mendoza Camacho “por supuesto que es de riesgo la actividad como legisladores”, y los contribuyentes decimos, que lo paguen de sus 104 mil mensuales, no de nuestros bolsillos.
Aunque no de mucho sirvió que lo sigan pagando, ya que cuando la próxima presidenta de la Directiva del Poder Legislativo, la diputada morenista Alejandra Valdez Martínez, enfermó de Covid-19, el seguro de gastos médicos no aceptó este padecimiento, por lo que se vio obligada a ir al Seguro Social, el cual tampoco la admitió y el ISSSTE se encuentra saturado, por lo que no quedó de otra que resguardarse en casa.
Aparte de las promesas de austeridad que pregonaron todos los simpatizantes del presidente de la República, también prometieron ser productivos y buenos legisladores. Los grupos ciudadanos inmediatamente redactaron y presentaron iniciativas que en el Estado se han frenado por años, como la aprobación de matrimonios igualitarios o la legalización del aborto, ¿no que mucha apertura y de mucha izquierda? Solo tres diputados, Marite Hernández Correa, Alejandra Valdez Martínez y Pedro Carrizales Becerra, defendieron ambos temas frente a demás morenistas, petistas, prianistas y chiquillada que apelaron a “que su religión no se los permite“, bueno, casi dijeron eso.
Hablando de Carrizalez Becerra, mejor conocido como “El Mijis“, hace pocos meses decidió que la política no es lo suyo y se fue a viajar por la República en medio de la pandemia, pero no ha pedido licencia (porque renunciar no puede legalmente), no se ha retirado del cargo, “no me gusta la política, pero voy a seguir cobrando“, vaya lógica y ejemplo.
Retomo lo de ser buenos legisladores, revisemos la tabla de “Congreso Calificado“, de 27 diputados, nueve pertenecen a la coalición “Juntos haremos historia“, en el décimo lugar se encuentra Ma. Del Consuelo Carmona Salas con una honrosa calificación de 3.5; en el nùmero 18 está la nueva presidenta de la fracción de Morena, Angélica Mendoza Camacho con un 2 de calificación; en el lugar 20 está Marite Hernández Correa quien al inicio de la Legislatura prometía excelente desempeño debido al perfil académico y referencias sociales.
Del número 20 al 23 se encuentran Alejandra Valdez Martínez, casi presidenta de la Directiva del Legislativo; le sigue la petista (que no era petista, pero al final sí porque de lo contrario no entraba a la Jucopo y no había bono) Paola Arreola Nieto con 0.5 de calificación; luego Rosa Zúñiga con un 0.25, quien el primer día como legisladora declaró a los medios que a ella solo la habían anotado en la lista, que ella ni siquiera quería estar ahí… ustedes juzguen.
Hay que destacar que ninguno de los antes mencionados en el ranking ni los que faltan por escribir, han presentado la declaración 3 de 3 o sí hay austeridad o hay opacidad.
Entonces seguimos con Pedro César Carrizalez Becerra, ocupa el lugar 25, luego Edson Quintanar Sánchez y Mario Lárraga en el puesto 27 con -0.5 de calificación, este último acusado de presunto acoso sexual, por condicionar aumento de salarios a sus colaboradores a cambio de favores en la cama, por cierto, literalmente ha legislado desde su cama.
Después de lo que acaba de leer (gracias por ello), la pregunta es: ¿ha hecho verdadera historia positiva la coalición Morena, PT, PES en el Congreso local?
Hasta la próxima porque hay mucha tela en el Poder Legislativo.
