La cada vez más evidente y descarada campaña política de Ruth González Silva entró en una nueva etapa: la etapa navideña de aprovechar las mil posadas que organizó el Gobierno del Estado para su beneficio personal, como ha venido ocurriendo prácticamente desde que inició la administración de su esposo, Ricardo Gallardo Cardona.
Durante la semana, Ruth González, en calidad de no se sabe exactamente qué, visitó al menos cuatro municipios de la huasteca potosina para encabezar, junto con el gobernador y alcaldes que lucieron sonrisa de oreja a oreja a pesar de no tener recursos, las posadas navideñas donde se entregaron juguetes y cobijas.
La presencia de la senadora en este tipo de eventos no obedece a su bondadoso corazón o espíritu navideño por regalar cosas, sino para aprovechar los millonarios recursos que invierte el Gobierno del Estado para ayudarla a posicionarse políticamente a lo largo y ancho de todo San Luis Potosí con miras a una posible candidatura en 2027, donde una vez, los programas, recursos y posadas son utilizadas también a su favor.